Diseño y programación de aplicaciones, la unión hace la fuerza

12 Dic Diseño y programación de aplicaciones, la unión hace la fuerza

Divide y vencerás dijo Filipo de Macedonia, padre de Alejandro Magno. Esta célebre frase, aun hoy tan socorrida y tan empleada, no tiene cabida sin embargo, en materia de diseño cuando se trata de aplicarlo a las nuevas tecnologías y, más concretamente, al diseño gráfico de aplicaciones interactivas y a su programación.Diseño y programación viajan últimamente, de la mano. No tendrían por qué hacerlo, pero ocurre; tanto es así que son ya muchas las empresas que no solicitan profesionales de una y otra rama por separado.

Favro es una sencilla y potente aplicación de gestión de tareas y proyectos.

Podría ser fruto de las demandas de un mercado –especialmente el de las nuevas tecnologías– cada vez más exigente, pero podría ser también consecuencia de la necesidad que los profesionales del diseño aplicado a las aplicaciones interactivas tienen de los programadores, y viceversa.El resultado: el sector pide expertos en ambas disciplinas.

AR es un proyecto de aplicación deportiva que planifica un entrenamiento personalizado.

Una vez más, comprobamos como, consecuencia del rápido avance de la tecnología, varios perfiles profesionales del sector se difuminan y se funden para dar lugar a nuevos especialistas y conocedores de más de una materia.Diseñadores gráficos y programadores han tenido que resolver sus diferencias iniciales y sus posibles incompatibilidades para poder conseguir el objetivo: que una idea o un prototipo vea la luz y lo haga en forma de diseño atractivo, funcional, comprensible y amigable, ¡casi nada!

Proyecto de una aplicación para restaurante realizado por Ion Shipilov.

Diseño y programación, programación y diseño

Tampoco es fácil acotar el trabajo de un diseñador. Hablar de esta profesión y hacerlo en relación a la tecnología y a las aplicaciones interactivas que hoy nos ocupan, significa hacerlo de expertos en imagen; una imagen imprescindible e irreemplazable en cualquiera de las aplicaciones que hacen furor entre todas las franjas de edad de la población.Un diseñador web, un diseñador de aplicaciones multimedia y de aplicaciones móviles, debe tener hoy en día, conocimientos importantes de programación, de desarrollo web y de desarrollo de software.

Whatsapp ha conseguido llegar a todo el mundo como una aplicación de mensajería instantánea fácil de usar.

Y todo esto, que puede parecer imposible a los ojos de un neófito, no lo es. Los centros de formación y las universidades preparan a futuros profesionales precisamente, con el fin de darles no solo una formación completa sino de enseñarles a unificar criterios y objetivos.Varias son ya las empresas que han decidido contar con equipos pequeños pero multidisciplinares; equipos de diseñadores gráficos, desarrolladores web e ingenieros de software en los que se identifican objetivos y se transmiten conocimientos.

Zara tiene su propia aplicación con la que el usuario puede gestionar sus compras desde el móvil.

Parece que para estas compañías, bien conocidas en su mayoría por muchos usuarios, el quid no debe de estar tanto en competir como en compartir. Sin ánimo de contradecir a Filipo de Macedonia y en lo que respecta a profesionales del diseño y de la programación, el quid de la cuestión podría estar también en otra tan socorrida como empleada frase, esa que dice que la unión hace la fuerza.

Spotify es una aplicación multiplataforma empleada para la reproducción de música.

La imagen de portada forma parte del proyecto Home Kit App para gestionar los dispositivos de casa desde el móvil.